Se dispone sobre el río Avia con gran monumentalidad. Sufrió los estragos de la Guerra de la Independencia aunque su estructura fue dañada considerablemente, lo que provocó su posterior caída, por los efectos colaterales causados por el terremoto de Lisboa en 1755.
En la actualidad, del puente antiguo se conserva unicamente una arcada de buen labrado, en las demás de las que tenemos los basamentos, ademas se hizo una intervención actualizada con unas estructuras metálicas y pavimento de madera, todo ello apoyado en los antiguos basamientos.
En su origen tuvo cuatro arcadas completas pero debido a la construcción del embalse en las proximidades, el lecho del río disminuyó, de ahí la desproporción de su dimensión.